Cómo crear un autorretrato que no se nos parezca

Primero, debéis conocer la historia de mi amigo, El Ente, él no es mi representante en estas redes interminables, no es mi representante, es mi autorretrato... Hay una diferencia y es que el primero me representa y el segundo soy yo mismo. 
Su proceso de creación es más [b]complejo[/b] de lo que parece a simple vista, desde siempre me había representado con el símbolo de un fantasma del Pac-man verde, al cual le salieron brazos y piernas y vive, el Sr. Comepacmans.

Sr Comepacmans abandona la idea de enamorarse

Este tipo fue mi representante, me representaba a mí pero no era yo. Con los años... he ido cambiando, cambio un poco más cada mes, soy un tanto filósofo-místico-espiritual-mierda, este cambio me hizo replantearme si él, el Sr Comepacmans, debería representarme, con el tiempo este personaje ha crecido, se ha construido su propia personalidad y no me representa demasiado bien por tanto empecé a hacerme autorretratos físicos.
Y ninguno me convenció, eran yo físicamente pero no decían nada de mí(salvo el último quizás). 

Un día me dije que quería hacer un... un cuentacuentos, un tipo que llevase imaginación... Algo así, un personaje que diese sonrisas y alegría y que fuese el típico personaje misterioso de las series de cuando eramos pequeños que simplemente intervenía en un par de ocasiones(siempre me gustaron todos estos personajes...), con los años me convertí en ese personaje para la vida de muchos, "el tipo del rincón que sólo te habló una vez para ayudarte y te cambió, vino de la nada y a la nada se fue..." En fin, para no enrollarme, no es que me conocí(cosa difícil de veras) y luego hiciese al Ente, sino que creció conmigo de alguna manera, la mayor parte de esta manera fue inconsciente. 

[Lo hice sin pensar demasiado y luego le di todo su significado. Por ejemplo, su piel verde es esperanza, esmeralda, vida; el sombrero con la luna representa la noche, los sueños; la larga gabardina le da misticismo y un toque "Dr Who" el cual también es un "ente" en la vida de muchos; sus ojos simbolizan alguna cultura antigua, pues estuvo desde siempre; el resto es simplemente diseño y "Uy, esto queda bien"]

Primer imagen en la que encontramos a El Ente

Digamos que soy YO en todo su ser. No tenemos el mismo cuerpo pero sí el mismo espíritu. Ambos somos cuentacuentos de no sabemos muy bien dónde, tan sólo viajamos, no tenemos hogar, conocemos mundos, espíritus, contamos historias y vivimos por nuestra misma esencia, nada más. 

El Ente alzando esa voz que se oye como un susurro en una noche abierta... 

Ahora, te he dicho, cómo yo lo he hecho, para hacer tú el tuyo necesitas de varias cosas: la primera es conocer tu ser, conocerte muy bien por dentro, tus anhelos, tus metas, tus caminos, tus sueños... conocerlo todo de ti en un modo existencial; segundo es conocer simbología, ya sea que te la inventes o bien sea que uses una simbología ya inventada(ejemplo ♀ símbolo de la mujer), el caso es usar una; tercero es tratar de darle tu mirada, el cómo ves tú las cosas así las tiene que ver él(o ella); y cuarto(seguro que me dejo algo), desarróllalo mucho... no te quedes sólo en la cubierta exterior, no hagas sólo un boceto rápido o siquiera un sólo dibujo de él/ella, haz cinco, diez, veinte, ¡cien! Haz los que tengas que hacer para notar que ese personaje vive, camina, existe en algún lugar aunque ese lugar sea tu cabeza. No lo trates como una mascota, como la mascota de una compañía, no... tiene que ser tú y como tal tratarlo como si fueras tú mismo

Mucha Suerte ^^

[東方 /SpinJazz/ Arrange] Doudan-Tsutsuji - Swinging Misfortune

Luces de neón, el sonido de los zapatos de Nueva York, los faros, la niebla, la suciedad de fuera, la pulcritud de dentro, lujo, blanco y negro, todo ello conjunto en la mente de los deseados y deseadores de la noche. Un líquido que se vierte en la copa de la aceituna y unos pasos de baile que retumban por las salas. Dorado y suelo de moqueta rojo por todas partes y la más brillante y deslumbradora cantante de lentejuelas que la noche pueda pagar. Las notas salen de su garganta y se mezclan con la suciedad del aire. 


La ciudad que respira, baila y goza al mismo tiempo. La ciudad de las cadenas y las libertades. 
Hay que celebrar, siempre hay que celebrar. El deseo lo requiere y manda. La noche está de rodillas con un collar atada al reposa brazos del sillón del deseo quien se encuentra en el cuello del vestido rojo. 
Los ojos de pícaro, las miradas indiscretas y los zapatos de baile. Nos acompaña esta noche la big band de los sin día que tocarán por hasta que las estrellas decidan dormir al fin.

Cambio

Las botas de cuero le rozaban al caminar por las altas hierbas de los países encantados de árboles colgantes y suelos pertrechados con la más fina arcilla de todo el lado oeste de los mares calientes. Apartó hojas de su cara, apartó lianas, ramas, liendres y aires sospechosos de colores inusuales. La maleza era inmensa y la densidad vegetal cegaba alrededor como una niebla clara, clara como los árboles que la rodeaban, árboles brillantes de troncos claros y translúcidos.
Daba más pasos y no hacía más que encontrar más bosque, "un lugar infinito del que no se puede escapar", eso la dijeron. "No entres" la advirtieron. Pero los sueños son muy poderosos en la gente inocente y propietaria de sí mismos.
Apretó el colgante de fino cristal con la mano y comenzó a andar con los ojos cerrados imaginando una puerta, la misma, una y otra y otra vez. Una puerta gris, desigual, grande y de piedra y de pronto se cayó al suelo, estaba delante de la puerta... temblorosa agarró el picaporte y empujó una puerta sin pared, y vio un horizonte, un horizonte naranja con un cielo azul fuerte lleno de manchas con forma de nube. Dio un pasó hacia dentro, cerró la puerta y miró detrás de ella.

Corrió, corrió mucho detrás de la puerta, sentía cada paso, lo sentía en su sangre que subía rápidamente desde la planta dolorida del pie hasta el cerebro, no le importaba. Apretaba los dientes para aguantar el cansancio, no le importaba. El sudor le hacía tambalearse y se le metía en los ojos, pero no le importaba. Corría hacia aquello que siempre quiso y a por lo que vino hasta estas alejadas y mágicas tierras. No comprendía el valor del camino, por lo que su objetivo cada vez estaba más y más lejos mientras corría hacia él. Hasta que se sintió desplomarse y el polvo acariciando su cara.

Lejos, muy lejos estaba aún su sueño. Parecía rendirse, pero decidió andar, anduvo durante dos noches, no sentía hambre y no sentía sed, pero se sentía pesada así que decidió caminar desnuda.
Poco a poco se fue acercando hasta que llegó.

Con ilusiones en los ojos contempló un majestuoso edificio delante suyo, de piedra, lleno de detalles, columnas, mármol, estatuas sin nombre ni rostro. Sólo se distinguían dos cosas, un rosetón y un portón. Lentamente abrió el portón... vio un juego de luces precioso que apuntaba desde las ventanas laterales hasta el centro de la sala pintada de adoquines negros y blancos y columnas de alturas infinitas. En el centro, los sueños de una pequeña chica que corrió mucho hasta encontrarlos, los sueños de cambio.
Nada es eterno, ni la propia eternidad será eterna.
Todo lo que comienza tiene que tener un fin, el destino sólo dura mientras dure la realidad, la muerte sólo es eterna mientras haya vida, el espacio no tendrá fin hasta que se agote el tiempo. Así como la realidad será eterna hasta que desaparezcan los sueños.

Se acercó poco a poco, dentro de aquel lugar no había sonido, ella andaba en silencio con sus ojos clavados en su sueño: el cambio.
Se sentía sola en mares oníricos de soledad y horror, la realidad no era mejor, después de ser traicionada por su familia y más tarde de ser vendida tres veces ser violada sus sueños se volvieron mucho peores. El mundo consideraba su propia existencia un insulto. El ser inmortal incapaz de morir, incapaz de vivir, incapaz de existir e incapaz de soñar. Ese era ella. No pudo amar y nunca la amaron. No le quedaba nada por ver ni nada por sentir.

Toda su vida pasó en un soplido y una lágrima cayó sobre su mano al estirarla y ver el cambio. Tornó la cabeza hacia los dos lados y extendió la mano. Tocó el cambio y ella comenzó a desaparecer, poco a poco, brillaba y flotaba, desde la mano hasta la cabeza y los pies, se iba haciendo añicos, desintegrándose en luz, en mariposas, en montañas, ríos, nubes, leones, ciudades, gorros, árboles y petunias. Comenzaba a flotar y entrar en trance, desaparecía de la realidad, los sueños y se desataba del destino, con una sonrisa.
Cuando no quedó nada de ella, el cambio devoró su pedestal, poco a poco y cuando toco la primera baldosa se extendió fugazmente hasta alcanzar la puerta, al borrarla, comenzó a borrar el suelo del horizonte rojo al llegar al infinito comenzó a devorar el cielo, y las nubes, todo. Pronto todo fue una puerta en la nada más absoluta. Allí espera vuestra condena. En el bosque que nadie debería entrar, una puerta, la puerta invisible, una simple puerta de piedra que guarda en su interior el cambio. Seres de la realidad y los sueños que vivís según vuestra esencia, esperad a que se abra... esperad el cambio, el cambio de todo, el cambio de nada, el cambio absoluto que no puede ser parado y no puede ser ignorado.

Todos llevamos dentro esa puerta, ninguno se atreve a abrirla... fingimos que no existe pero en el fondo, sabemos que está allí, aguardando... la puerta que guarda todos los secretos, la puerta que guarda todas las preguntas, la puerta que hará que seamos todo y nada... por siempre, en un enlace infinito y verdaderamente eterno, el cambio.

Austin Wintory - Apotheosis

La visión se nublaba, espejismos vislumbraba en el horizonte, un horizonte desprovisto de civilizaciones y de cualquier otra señal que distraiga la plenitud, sólo el cielo azul y el suelo rojo a sus pies. Un paso y el espejismo cambia, por entero, escalonadas estructuras y arqueados edificios surgen de la nada levantando un polvo que le arrastraba y le cegaba. Cuando quiso darse cuenta y mirar hacia arriba vio la mayor ciudad que jamás imaginó, la ciudad de los sueños, llegaba hasta las inalcanzables nubes en ese desierto rojo infinito. Lo único que podía interesarle de todo ese yermo había crecido y estaba al final del horizonte, sólo tenía que ir a por ello.
Sudaba, miraba inquieto y tosía despacio. Daba los primeros pasos, no desaparecía, estaba allí. Daba los segundos pasos, no dejaba de estar quieto y real. Daba los terceros y se acercaba, comenzaban a sonarse campanas desde lo alto de las nubes, ¿era real por fin? ¿Lo que andaba buscando durante tanto tiempo por fin era real y duradero?
Saltó y, como él soñó, voló, lo contempló por entero; era magnífico, lo que más había soñado y anhelado estaba justo enfrente suyo abierto completamente para él.

Bajó de su vuelo, posó los pies sobre el suelo. Le echó un último vistazo... se le derramó una lágrima que no pudo contener más tiempo... El sol brilló y él se acercó, posó su mano sobre él y dio media vuelta, al fin lo había logrado.
El camino había concluido pero era un ser humano, una persona real... cuando alcanza el final de un camino no planta su bandera y pasa a la posteridad, no, siguen adelante y trazan otro camino, hasta el fin del horizonte, hasta que se pose el sol que los contempla... por toda la eternidad.

Preisner: Life: Lacrimosa - Days of Tears

Cuelga del cielo negro un péndulo de enormes proporciones, anclado a él se sitúa una habitación de cristal con un suelo de mármol donde se refleja lo que los ojos quieren ver. Sentado con una túnica blanca me encuentro yo, anclado y en una posición de ataraxia.
Comienzo a sentir los golpes de la dama que quiso entrar. Llegó hasta allí y no quiere echarse atrás.
Paso a paso comienza a acercarse más. Pregunta si puede entrar, la respuesta es negativa, pregunta si puede hacerlo en silencio, la negativa se mantiene, pregunta si puede entrar sin que nadie se entere, no se puede. Se sienta. A esperar. Esperar hasta el fin, hasta que la puerta imperturbable se abra. De espaldas me encuentro a la puerta, no quiero que me vea, no quiero que vea mi cara. Una cara que ahora es la de un niño con lágrimas brotando como cataratas hasta el suelo del reflejo, hasta el corazón de los amantes, hasta las estrellas del alma. Mantengo mi posición y escucho un suspiro que me destruye una vez más...

Siento que el texto no esté a la altura de la canción, pero necesitaba escribir esto y esa música es el viento susurrante de los corazones pensantes... 

Come Around - Rosi Golan

Mirar por la ventana y ver las más simples gotas de lluvia que mojan sin quererlo y se las margina por malignas. El mal y el bien de las gotas de agua es decisión del empapado.
Caen y caen y caen, mojan y mojan y mojan.
Respiras y las sientes por todo tu cuerpo. Se adhieren como viajeros que buscan un hogar al que poder llegar. Cuando una cae se une a las demás, ya que una gota no moja pero un cubo de gotas en abrazo pueden empapar.
Se sienten por toda la espalda, por la nuca, se meten por donde nadie las llamó, son libres y son auténticas. No necesitan de nada que las identifique o etiquete. Siempre están presentes.
No tienen miedo y saben su que su momento llega en el instante justo que es necesario. Ellas nunca abandonaron la pasión y nunca abandonaron su misión predestinada, la misión de la gota de agua, la esencia de la gota de agua, su esencia...

Tan sólo, observa.

A Fine Frenzy - The Beacon

Nunca lo fueron.

Compartieron los momentos más tiernos de su infancia. Ambos se criaron juntos, frente a la costa de las cosas se sentaban... Uno siempre junto al otro. Se ayudaron en cada tormenta, cada uno con el paraguas del otro. Se sonrieron juntos en los días soleados. Anduvieron por caminos vacíos llenándolos de ellos mismos. La traición nunca siquiera lanzó su semilla, los malos sentimientos no lograron existir. Siempre uno al lado del otro.
Caminaron y caminaron por vidas y sueños de la mano.

Pero... nunca lo fueron. Nunca fueron amigos. Nunca necesitaron una palabra para ellos, nunca quisieron una etiqueta. No la pensaron siquiera. La única palabra que les une es aquella que sale de su corazón, es aquella que no necesita ser pronunciada.

Blue Lips - Regina Spektor

Corre sin mirar atrás adentrándose entre sus propios árboles. Corre apartando las hojas de la cara. Corre sin derramar una lágrima sin apretar un labio antes. Corre a ciegas por su bosque.
Algo malo ha pasado. Un rechazo ha sucedido.
Ha llegado al centro del bosque, donde aclara el sol. Se quedó de rodillas, se apartó el pelo de la cara, miró hacia arriba con la cara empapada en punzantes lágrimas. Esbozó una sonrisa de alivio. Ilusiones.
Construyó puertas y murallas entre los árboles. Nadie pasará.
Se hizo de noche, se abrazó las rodillas, miró hacia abajo, abrazó a la soledad.
Los árboles se giran hacia ella para cobijarla de la tormenta que se aproxima.

Entra alguien... lentamente... le trae un paraguas y se arrodilla a su lado. La acaricia la cara... ella lo mira con un solo ojo envuelto en verde esperanza... él sonríe, ella ríe, ellos se besan. 

Haven't Met You Yet - Michael Blue

Paso a paso por baldones escalonados nos deslizamos. Damos brincos y saltamos los muros de la imaginación. Caminamos por los tejados rozando las tejas blancas y acariciamos las nubes que nos observan. Cogidos de la mano seguimos con cada pierna por un riachuelo de edificios que acaba en nuestra playa.
¡Revuélcate por la arena! Escucha el rugido incesante del mar, el color azul que nos envuelve y las sonrisas sinceras. Todo está en conjunto de manera idílica.
¿Acaso no recuerdas mis palabras? Están allí, escritas a fuego en el corazón de la Tierra. ¿Las ves? No están ocultas para tus ojos, el mar no se las llevará y el viento no podrá con ellas.
Son palabras, sólo palabras, lo sé, pero dentro tienen el significado que buscas. La idea que las sustenta es tu esencia misma y tu mejor cara las ilumina. ¿No las sientes? Están tatuadas en tu alma, tan sólo mira dentro y podrás saltar tan alto como quieras.

Sólo siéntate en una nube. Abre tu diario y léelas, no llores, ya lloraste bastante, sólo queda la sonrisa. 

Be OK - Ingrid Michaelson

Da tus primeros pasos hacia aquí, golpea el suelo, es tu momento. ¡Baila!
Las sonrisas se vuelven sinceras y despejan los nubarrones que llevan las sombras acorbatadas de sombrero. Estamos cerca. Cerca de todo. Tan sólo vivimos y queremos que todos vivan.
Los edificios se desdoblan, los túneles se vuelven puentes, nosotros corremos por el cielo.  Tan sólo queremos que los demás vivan.
Pintamos la ciudad pestañeando, bailamos sobre las paredes, nos reímos del hormigón. Es un día precioso.
La noche nos aguarda, ¡encendámosla! Las estrellas te saludan, los árbolitos te hacen una mueca y la casa de enfrente se sonroja. Es nuestro momento, siempre lo fue, el momento de vivir.

Between The Lines - Sara Bareilles

Margaritas voladoras en corrientes invisibles ascienden hacia unas nubes de la altura de nuestra humanidad. Se acercan acariciando las briznas de hierba, verde intensa y viva. Los dientes de león se amedrentan a su paso. Lilas las saludan. Recorren acantilados y llegan a mares insondables, siempre azules, siempre salvajes. Acarician el típico faro, acarician el poste habitable de espirales rojas y blancas que ilumina los caminos.
Se detienen en sus rodillas... las recoge y admira. Las huele, se coloca la falda y su nariz respingona se llena de sabores con los que bailan sus pecas. Sonríe, mira al cielo y las suelta.
Las margaritas siguen viajando, se alejan de nuestra costa y entran en nuestro bosque. Que no se pierdan, por favor, que ya se han perdido en sus espesura.
Encontrarán la salida, siempre lo hacen, pero su recuerdo será permanente... por suerte o desgracia.

Broken Chair - Chris & Thomas

Desde esponjosas nubes blancas como la nieve del más frío ártico salta y camina por el cielo dibujando sus colores, acariciando con sus sonrisas, grácil y sencilla, compleja y salvaje, la musa de los cielos se despierta.

Esperan su llamada, el color más vivo que nunca la mira agradecido, los extraños son bendecidos con emociones desde lo más profundo de su ser. Los que dejan de mirar hacia abajo comienzan a implosionar en colores y emociones transformados en lágrimas. El cielo explota en una luz celestial, en nubes mágicas de colores perfumados.
La musa creadora se posa en su poca humanidad y toca la nariz de aquellos que la saben ver, brillan en el cielo sus esperanzas. Los colores fluyen por sus seres. Los espíritus se ensanchan y explotan. Nuestras esencias se encuentran en libertad espiritual, por fin.
Vemos a la musa y te encontramos en mitad de la colorida amalgama que se une a la maravilla.

Pestañeas creando olas de humildad, sonríes destruyendo depresiones, nos miras desmayando nuestra imaginación, me rozas con tus labios, muero en de corazón.

Braver Soldier - Russian Red

Notas el paso del tiempo en su mirada. El sol ilumina tu visión de un atardecer, el atardecer de los corazones. Las chispas que se apagan en las cavernas ahora oscuras. La visión da vueltas por un cielo azul de nubes naranjas y sientes que no puedes.
No puedes soportar qie haya pasado, no comprendes cómo ha pasado, qué pasó. El tiempo pasó. Su mirada quebró y no volviste a sentir lo mismo. No volvió a ser todo igual. El baile púrpura se paró en un salón ahora convertido desierto donde cada visitante se ha transformado en espejismo.
Ahora caminas por arenas, las manos en tu barbilla y tus ojos miran al cielo despejado. No hay nubarrones en tu desierto. Miras a la nada. Lo añoras a veces, aceptas lo que pasó. Las etapas pasan, los corazones se apagan, y la mirada baja.
La música volverá a entonar y el baile volverá a comenzar...

Blue Drag - The Swing Ninjas

Bailaste como una pluma emparejada con el viento al son de los cánticos puros de la noche. Pasos de zapatilla rompieron la monotonía del suelo, todo giró a tu alrededor y las sonrisas salvajes fueron tu paisaje. Sudor, baile y adrenalina. El aire brilló y el mundo dio vueltas. Una media por la rodilla, despeinada y alegría superficial fueron tus sentidos.

Aburrida, escapabas del lugar, las calles eran tu lienzo, el movimiento era arte y tu mirada el sentido.

El pelo era arrastrado por el viento, los zapatos eran devorados por la locura, los ojos se mojaban de libertad y la boca expiraba música y velocidad. Aplastabas charcos, cantabas y corrías por callejuelas desconocidas bajo la tutela de unas preciosas estrellas. Sabías a dónde tienes que ir.

Pisabas esquinas, doblabas aceras, subías por muros y saltabas ventanas.
Los edificios te saludaban con luces de neón y la calle te convidaba a niebla y oscuridad.
El gris embargaba la visión que tu pelo rubio pintaba de color a su paso.

La ciudad se acaba. La rutina queda a tus espaldas y te paras en seco. Miras boquiabierta hacia delante. Allí está, sujetando una flor. Mirarás bien y te sonreirá.

Are You Coming Home, Love MOM - World of Goo Soundtrack

Atardeceres rojos por la mirada de las gaviotas de mayo. Puertos inconclusos se ven al fondo de un mar de colores ardientes y reflejos difusos. 
La ciudad blanca nos alumbra con el reflejo de los ojos de las viviendas cementadas en la cortina de la córnea con la que me miras. Ballets de cristal en tus pestañas y soles rotos en final de la ojeada. No paro de mirarlos, cálidos y cercanos mientras me analizan fríamente. Son preciosos y frágiles como la más pura gaviota de cristal que grazna en un cielo diseñado para ella, para nosotros. Sentados en el reflejo de las olas no vemos más que nuestra propia realidad la cual espera que se cumplan nuestros más profundos sentimientos y lentamente, sin que nuestra razón nos coarte, nos acercamos. 
Esos ojos hipnotizantes son cubiertos de manera muy lenta y segura por unos débiles párpados acompañados de brillantes pestañas . Los míos hacen lo mismo quiera o no quiera yo que lo hagan. Mi cabeza se acerca a la suya. El sol se apaga para nosotros y suelta una última chispa que arderá en nuestro interior durante todo lo que resta de noche. 


Dedicado a los lectores que aún me quedan, que pese a mi falta de brillantez, me soportan y admiran. Cosa que no dejará de sorprenderme, espero que nunca

Jahzzar - Roads that burned our boots

Dedos largos y finos por sus curvas de carretera desértica y piel a flor de nervios que se agita sudorosa entre caderas propias de las ninfas de la antigüedad.
Los mismos dedos acarician flores perfectas mientras la lengua le susurra al cuello con cariño que todo está bien y que se deje llevar por las carreteras de la pasión.
El rojo tinta sus mentes y el pelo se entrecruza entre gritos sordos y movimientos que se estremecen, la suavidad de unos muslos encuentra los opuestos excitantes y los pétalos que salen de la canción les inundan la habitación.
Mira hacia el infinito mientras una lengua recorre su secreto más oculto y con aire caliente exhala su vida en un suspiro, éxtasis infinito. Se vuelven a mirar, las miradas se penetran entre ellas, el roce de los labios es intenso pero lento, se susurran "te quiero".

YACHT - Utopia (Instrumental)

Zapatos de claqué que sobre cementos urbanos de ciudades creídas y egoístas se deslizan por encima de las montañas de egos y andamios de la cultura de lo superficial. 
Corren por las paredes de hormigonadas, esquivan a los hombres trajeados y sin cara para colarse en lugares no habituales. Corren por túneles al son de una canción, escalan por muros y abrazan árboles al compás de la música de su vida. 
Se desplazan por el aire entre tejados inciertos de edificios cuadrados rellenos de gente callada y cuadrada. 


De pronto, un hombre la contempla atónito. Se le cae el café a cámara lenta mientras aparecen ojos y boca en su rostro. El pelo comienza a brotarle como hierba en praderas nuevas, las orejas aparecen como por arte de magia y del centro aparece una montaña con dos agujeros. La sonrisa se extiende por su cuerpo y el arte lo desdobla en un grito de pasión. Sale corriendo de aquel edificio cuadrado a toda prisa y se pone unos zapatos de claqué que sobre cementos urbanos... 

Saludos a las dos nuevas seguidoras ^^ Espero que os gusten estas cosas y si no, pues como el que va a una tienda a "mirar". 
Aprovechar para decir que ahora sólo usaré música sin licencia y gratuita que se puede descargar aquí http://freemusicarchive.org/

Botanicula Soundtrack 03 - letejono (DVA)

Pantalones rasgados caminan por troncos abandonados y carcomidos por colores vivos y claros. Blancos y verdes alumbran el bosque y ella juega con él cual ninfa espíritu del lugar.
Las criaturas fantásticas que lo habitan la saludan y sonríen, pequeños seres de madera, pequeños dioses sonríen. El otoño y la primavera alumbran los musgos de los troncos caídos y los tocones solitarios.
Los calcetines rosas y negros a rayas bailan con las figuras de los curvados árboles; cuanto más se adentra, más mágico es. Paso tras paso se introduce en mundos imaginarios y fantásticos salidos de mentes infantiles e inocentes.
Su sonrisa abarca todo su espíritu y mientras los abetos y los olmos la saludan con el viento que los envuelve. Polvos verdes adornan el aire y el polen revolotea libre por el lugar.
Ella se sumerge en una piscina de hojas secas y siente el abrazo de la naturaleza, un abrazo del que no quiere salir, del que quiere ser partícipe para siempre.

Por desgracia, se despierta.

Botanicula OST - Submarine

Corazones temblantes en aguas terrenales se abalanzan sobre la densa y reluciente arena de la playa a la que han aterrizado dispuestos a encontrarse en otro mundo el cual tienen justo delante de ellos.
Un mundo informe, de cosas por descubrir, esencias por sentir, emociones por disfrutar y experiencias por vivir.
Lo artificial los acompaña, es difícil encontrarse al natural en ese espacio de tiempo concreto, el cemento y el gris pueblan ese mundo pero no le tienen miedo. Se tienen el uno al otro.
 Aún así nada escapa al gris, la apatía puebla los barrios y la rutina los vigila con mucha atención.
Aún así, no dudan, se deslizan por al fría y hormigonada noche para encontrarse el uno al otro, al fin, se dan cuenta de lo más importante, no les importa nada más que estar junto al otro, su circunstancia es indiferente si pueden crear un mundo propio.

Enya - Storms in Africa

Flores escarchadas en pianos de madera suben lentamente por la espalda de los sentimientos ocultos y verdaderos para adornarlos de manera sublime en un marco incomparable. En medio del bosque, los árboles alineados hasta donde alcanza la visión, es aterrador y precioso al mismo tiempo una amalgama de sentidos invaden a la visitante del bosque, la chica que busca su corazón. 

Los animales púrpura la miran admirados, los árboles danzantes la saludan con elegancia y sobriedad mientras que el sol baila a su alrededor. 

Pisa la hojaresca y el suelo húmedo, paso a paso, mientras la luz acaricia suavemente su piel y su cabello. Sus movimientos cotidianos comienzan a convertirse en los de una grácil bailarina en esta búsqueda espiritual. 

Las cortezas de los robles y de los olmos comienzan a doblegarse a sus ojos, la naturaleza se pone a su disposición y ella la quiere a su lado, como una igual. 

A cambio, la naturaleza la conduce, la conduce de maneras que nunca sintió antes, Gaia es una buena madre después de todo. 

Ve ese marco incomparable. Recoge sus sentimientos robados y perdidos y la emoción la hace volar entre las nubes de la razón y la belleza.